lunes, 2 de octubre de 2017

La Externalización de Servicios, ¿Hace más competitiva a la Empresa?

Sabe que buena parte de los trabajos que se realizan en su empresa están desarrollados por terceros (la limpieza, la seguridad, la tecnología, la gestión de nóminas, la selección de personal, la formación,…).    Ahorro de costes, flexibilización de recursos, agilidad operativa, aumento de la especialización, necesidad de poseer un conocimiento específico o una maquinaria determinada, dar cobertura al dimensionamiento puntal de plantillas,… son algunos de los motivos que llevan a las empresas a recurrir a la externalización de ciertos servicios.

La Externalización de Servicios, que no siempre supone sacar físicamente el servicio fuera de la empresa, sino incorporar un recurso determinado a la propia organización, nace como un intento de las empresas por reducir y/o variabilizar sus costes fijos consiguiendo al mismo tiempo, flexibilizar su estructura productiva y optimizar el uso de recursos.

El concepto tradicional de empresa con todos los departamentos se ha quedado obsoleto, lo cual hace que cada vez se tiende más a externalizar toda aquella actividad que no se corresponde con el “Core Business” del negocio.  Lejos de lo que se pudiera pensar, la contratación de estos servicios no tiene por qué ser de un gran volumen de recursos durante un largo periodo de tiempo, sino que también puede ser un servicio puntual durante un tiempo limitado.  Consciente de este hecho, las empresas outsourcing ofrecen, además de servicios integrales, servicios puntuales.

“Externalizar te permite disponer de lo mejor cuando lo necesitas, con costes conocidos, y liberado de tareas específicas para las que las empresas contratadas son especialistas”

EVITAR FALLOS
Una mala elección del proveedor, la falta de implicación de los proveedores en la cultura corporativa de la empresa, dependencia de terceros, una mala gestión interna en el proceso de Externalización de Servicios,…. puede suponer por un lado graves problemas para la empresa, y por otro una quiebra del clima laboral, por ello tiene que existir un buen plan de comunicación, así como una total transparencia en la gestión de las personas

Ante esto se han identificado una serie de prácticas fundamentales para toda empresa que quiera obtener el máximo valor de la externalización, proponiéndose:

1.)    Alinear la estrategia de outsourcing con la estrategia corporativa
2.)    Entender el valor añadido que puede aportar una correcta gestión de los partners de Outsourcing
3.)    Tomar las decisiones de outsourcing basadas en factores estratégicos y tangibles, no simplemente en los costes
4.)    Mantener un flujo regular de datos, información e ideas
5.)    Llevar un seguimiento de los niveles de calidad del servicio

Por lo tanto, la pregunta es sí la externalización de servicios hace más competitiva o no a la empresa.  Parece que sí, siempre y cuando se entienda la externalización bajo una perspectiva de socio, para así desarrollar valor mediante el Know How acumulado.